Ayer, 9 de abril, se abrió el proceso de inscripción para acceder a las viviendas de alquiler del Plan VIVE en San Sebastián de los Reyes. 488 viviendas que se están construyendo en estos momentos en la Avenida de los Arribes del Duero, en el barrio de Tempranales, y que irán destinadas a quienes puedan pagárselas, que no son mis hijos, y tú sabrás si son los tuyos.
Entre 2400 y 3800 euros netos tendrán que ingresar los aspirantes a estas viviendas de alquiler «asequible» concebidas por el Partido Popular de la Comunidad de Madrid.
Parece que nos lo tragamos todo, como pavos. Desde la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes, ambos gobernados por el Partido Popular, anuncian un plan de vivienda de alquiler que llaman “asequible”, y que mi hija definió ayer como “Plan NO VIVE”.
¿Qué joven o que pareja de jóvenes, o de mayores, o de menores emancipados, puede pagar por un alquiler entre 900 y 1300 euros al mes, y que este pago no supere el 35% de los ingresos de la unidad de convivencia, como rezan los requisitos para poder acceder a solicitar una de esas 488 casas? Solo los que ganen entre 2400 y 3800 euros, como mínimo.
¿Qué joven o que mayor o que unidad de convivencia, o que menor emancipado, además de pagar esa astronómica cifra por el alquiler de una vivienda entre 44 y 76 metros cuadrados podrá ahorrar para algún día comprar un techo definitivo?
¿Cómo afronta una joven de casi 30 años con salarios entre los 600 y los 1300 euros un proceso vital que le permita ser independiente, autónoma?
Lo único igualitario que hay en la región, capital de España, es la tarta de la pobreza, que se reparte de forma muy similar entre las diferentes franjas de edad, y que alcanza en este Madrid de la libertad a 1.370.318 personas que están en riesgo de exclusión.
Según datos del INE, el umbral de renta de un hogar en POBREZA SEVERA está en 6.725,33€ para una persona sola, menos de 560,44€ mensuales y de 14.123,33€ para una familia con dos adultos y dos menores, 1.176,9€ mensuales (294,26€ mensuales por persona). ¿Cuántos de nuestros vecinos se encuentran sufriendo los rigores de estas cifras?
La renta media en Sanse en 2021, según el INE, era de unos 37.000 euros, ocupando el puesto 53 entre los municipios de España con renta media más alta. Pues bien, quienes pretendan acceder a una de estas viviendas del Plan Vive tendrán, como mínimo, que ingresar esta renta media porque de otra manera no cumplirán los requisitos de adjudicación. Si el pago del alquiler no puede superar el 35% de los ingresos, esto quiere decir, si los números no nos engañan, que tendrían que ganar netos entre 2400 y 3800 euros al mes. ¿Cuántos de vosotros, mujeres y hombres adultos, mayores o jóvenes os aproximáis a estas cifras por rendimientos de trabajo? Yo desde luego no, ni mis amigos, ni mi hija… ¿Y de los tuyos?
Según especifica el dossier de este Plan «Convive Madrid» en el apartado de requisitos especifica que será necesario tener unos ingresos brutos -entre todos los miembros de la unidad de convivencia del solicitante- que supongan como mínimo 1,5 veces el IPREM (579,02 €/MES; 8.106,28 €/AÑO) y como máximo 7,5 veces el IPREM, si se tratara de viviendas con protección pública para arrendamiento de precio limitado (VPPL), como es el caso de las construcciones de San Sebastián de los Reyes. Traducido a cifras, estos requisitos dicen lo siguiente: Los aspirantes habrán de tener ingresos anuales entre los 15.199,28 € y 78.346,78 €.
Con unos ingresos de más de 78.000 euros anuales (cifra muy similar a la renta media del municipio más caro de España, Pozuelo de Alarcón) nadie tendría problemas para acceder a estas, o a cualquier otra vivienda, ahora bien, el límite inferior de 15.000 euros no permite cumplir el requisito de «no destinar más del 35% de los ingresos netos anuales de la unidad de convivencia al pago de la renta total anual».
Ya lo decía el Sr. Perdiguero, «Sanse no es ciudad para pobres».
Una labor admirable