Cuando las leyes de la Monarquía Borbónico-Franquista, condenan a un colectivo de jóvenes por querer devolverle la vida al pueblo abandonado de Fraguas, situado en la Sierra Norte de Guadalajara, después de más de sesenta años de barbecho, a pagar los costes del juicio y demolición de lo construido cómo sustento y vivienda, después de demostrar que otra forma de economía y estructura social es posible, sus seis últimos pobladores fueron capaces de pasar el confinamiento alejando al coronavirus de sus inmediaciones, las leyes de Carlos Lesmes, les encarcela y les roba las ilusiones y los sueños, por creer en otra España.
Me duele España, cuándo quien se ocupaba de la agenda y el Twitter del perro de Esperanza Aguirre, llamado Pecas, hoy Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso, quiere imponernos medidas que costarán más esfuerzos para los profesionales sanitarios, con menos recursos humanos y materiales, costando más vidas de los ciudadanos de Madrid, con tal de ser la nueva Agustina de Aragón, contra la Chusma Bolivariana y Comunista que, lo único que pretende es eliminar los últimos valores cristianos de Occidente. La necedad y el fantasma de Billy El Niño, se hicieron dueños de todos los rincones de la antigua Dirección General de Seguridad, haciendo que cada campanada del reloj, suene a lágrimas y muertos. Sólo falta en dicho local, el lema acuñado por el tuerto Millán-Astray, » Viva la Muerte «.
Me duele España, cuando compruebo nuevamente que los que se hacen llamar Periodistas, doblegan la verdad a los intereses de sus dueños y señores. La prensa canallesca, digital, gráfica, radiofónica o televisiva, mantiene el mismo discurso adoctrinante e inmovilista, tratando a la opinión pública como a un Rebaño Dócil y Domesticado, Aristócratas Ignorantes del bar o tasca de su barrio o pueblo, símbolos patrios de llanto fácil en los entierros y fiestas patronales de nacimiento o residencia.
Un sólo editorial es más que suficiente, adaptado al acólito consumidor de ideas e información, suministrada para ser tomada como dogmas de fe, al igual que las homilías parroquiales de los domingos.
Hablar hoy de Prensa Independiente es hablar de Ciencia Ficción.
Me duele España, al comprobar el Inmovilismo de nuestros Universitarios, ante la situación económica, sanitaria y social, que sufre nuestro país. Es su Futuro lo que está en Peligro, y son incapaces de Rebelarse contra una realidad que los anula como personas y los convierte en autómatas consumidores de fantasías y quimeras.
¡¡¡ Que poca Sangre corre por sus venas ..!!!
Cómo a D. Miguel de Unamuno, me duele España al comprobar la división de sus gentes y sus pueblos, auspiciados por juntas de accionistas trasnacionales, sujetando un modelo de estado corrupto e insostenible, llamado Monarquía. No es producto de ningún Derecho Divino tal institución. Es la Consecuencia del Nacionalcatolicismo, La Sección Femenina, El Frente de Juventudes y el Auxilio Social. Dichas organizaciones rancias, siguen ancladas en la hipófisis colectiva, glándula encargada de nuestro crecimiento como pueblo, alojada en la llamada silla turca, situada en la base del cráneo.
La Carcunda Rancia pretende recuperar para imponerse, el Confinamiento, el Aceite de Ricino y la Cartilla de Racionamiento.
¡¡¡ Tiempo al tiempo…!!!
Tengo muchos motivos para que me duela España, cómo los tenía Unamuno. El principal es la sumisión de los Españoles.
Pedro Mayor
Gracias por expresar en tan poco espacio ese dolor con el que much@s nos sentimos identificados.
Te daría el pésame, @Pedro Mayor, si no fuera porque lloro contigo en el mismo funeral de esta España que tanto duele.
Me siento totalmente identificado con lo que expresa el artículo. Son muchas las razones por las que llorar. Esa España nacionalcatolicista que much@s hemos conocido y sufrido sigue vigente.