Ganemos Sanse está roto

Ramón Sánchez Arrieta, Concejal de Economía y Hacienda, valora la opción de que Ganemos Sanse deje también el tripartito si éste sigue apoyando la presencia de Miryam Pérez en el gobierno, tras su abandono del grupo municipal de Izquierda Independiente, cuyos integrantes ya han anunciado que mañana jueves a las 10:00 entregarán sus delegaciones de gobierno en el registro del Ayuntamiento. La postura del edil choca frontalmente con la de su compañero en Izquierda Unida, Javier Heras, Concejal de Recursos Humanos, Contratación, Compras, Patrimonio y Deportes, quien apoya la continuidad de la Concejala de Cultura, al igual que lo hace el grupo municipal socialista.

Vayamos por partes: Miryam Pérez anuncia el 21 de Diciembre su decisión de abandonar el grupo municipal de I.I. pero sin renunciar a su acta de concejala ni a la Delegación de Cultura. El partido de Rubén Holguera le exige que devuelva el acta y solicita al alcalde, Narciso Romero, que devuelva las atribuciones del área de Cultura a su grupo municipal. Tras las múltiples manifestaciones públicas en su contra por parte de los miembros de dicho grupo municipal, Miryam Pérez explica a los portavoces de todos los grupos municipales que su decisión se produce por el trato personal y profesional recibido por parte de sus ya ex-compañeros. El PSOE se basa en este argumento y en informes jurídicos emitidos por el Secretario del Ayuntamiento y la Federación Española de Municipios y Provincias en los que se indica que no se puede considerar tránsfuga a la concejala, para no cesarla en su labor. Javier Heras mientras tanto, al más puro estilo de Susana Díaz, se ofrece para «coser» al tripartito mediante el consenso y el diálogo. Izquierda Independiente, visto que sus socios de gobierno no tienen intención de mover ficha, convoca su Asamblea y deciden darles un ultimatúm: o recapacitan su postura en el plazo de una semana, o saldrán del gobierno.

Ante esta tesitura, el viernes pasado se reúne la Asamblea de Ganemos Sanse, tras más de 4 meses desde la última convocatoria. El orden del día de la reunión es modificado a última hora por petición de varios militantes no afines a Heras, con el objetivo de tratar en primer lugar la crisis de gobierno, ya que este aspecto había sido relegado al final de una larga lista de puntos con la intención de ni siquiera tener que tratarlo (la asamblea había sido convocada a las 19:30 en un centro municipal que cierra a las 21:00). Durante la reunión Javier Heras expresa que se pueden «tener opiniones diferentes sobre si es una tránsfuga o no, pero yo no me voy a quedar en las opiniones, porque si nos quedamos en las opiniones es cuando aparece la división y nosotros creo que no debemos dividir.  Y lo que es absolutamente objetivo y no es opinable es el informe jurídico del Secretario del Ayuntamiento que dice que esta mujer no es una tránsfuga.«

«La situación de San Sebastián de los Reyes es completamente diferente a la de Cartagena, Fuengirola o Chinchón«, continúa el portavoz de Ganemos, «más allá de las opiniones, quedémonos en el hecho jurídico y si no es una tránsfuga, busquemos la unidad y no nos vayamos del gobierno porque otros compañeros nos presionen» (en referencia a I.I.). Es en este punto donde surgen las fricciones con su compañero en el gobierno. Ramón Sanchéz expresa en la asamblea su punto de vista, dejando claro que la figura del «tránsfuga» no es en absoluto jurídica sino política, por lo que los informes a los que se refiere Heras serían papel mojado. Y hace un llamamiento a la coherencia política, esa que se ha echado tanto en falta en la trayectoria del tripartito, pues la formación a la que ambos pertenecen, Izquierda Unida, es firmante del pacto anti-transfugismo, por lo que dejaba entrever que deberían abandonar ellos también el gobierno municipal si Narciso Romero persiste en su actitud de mantener a Miryam Pérez en sus atribuciones.

Sánchez Arrieta mueve ficha

Ante la disparidad de criterios Ramón Sánchez Arrieta, como responsable de organización, convoca al día siguiente la asamblea de IU en Sanse para el jueves 9 de Febrero. La idea del edil es que los militantes puedan tomar una decisión sobre la situación del pacto de gobierno, del que forman parte dentro de la coalición electoral de Ganemos Sanse. Para blindar la resolución que puedan tomar los y las afiliadas, advierten en la convocatoria que la asamblea, aunque tenga carácter abierto para el debate, «tendrá carácter de interna en lo relativo a la toma de decisiones«.

La mesa coordinadora de Ganemos Sanse responde el lunes 6 de Febrero convocando una reunión de la misma para el día siguiente, en la que deciden emplazar para una nueva asamblea el viernes 10 a los y las militantes de Ganemos Sanse. En medio de esta guerra de convocatorias, la gestora determina también enviar un comunicado al resto de integrantes de Ganemos en el que expresan su «sorpresa ante esta convocatoria puesto que entendemos que es en el ámbito de la convergencia donde Izquierda Unida es una parte junto con Alternativa Socialista y el resto de independientes que se presentaron en la coalición electoral, que es donde debe tomarse esa decisión puesto que evidentemente no parece lógico que sea una parte quien decida por el todo«.

Esta mesa está compuesta actualmente por sólo 5 miembros, tras la dimisión de otros tantos en la anterior Asamblea, una renuncia motivada por la falta de transparencia de los integrantes del grupo municipal de Ganemos Sanse, concejales incluidos. De los 5 miembros actuales, 3 de ellos trabajan bien para el Ayuntamiento, como es el caso de Pablo Melgosa, coordinador del grupo municipal, bien para subcontratas del mismo. Es decir, Javier Heras ostenta actualmente el control de la mesa, cuyo mensaje continuaba incidiendo en que les «sorprende y molesta especialmente que se haya convocado sin haberlo comunicado el pasado viernes en la asamblea que celebramos en Ganemos Sanse donde se inició precisamente el debate de la permanencia o no en el gobierno… Respetamos como no puede ser de otra manera los órganos internos de cada partido, de la misma manera que exigimos el mismo respeto para los de Ganemos Sanse«. Finaliza el comunicado animando a los afines de IU a asistir a la asamblea de Ganemos del próximo viernes, «donde esperamos contar con vuestra presencia y opinión en el marco más amplio del que formáis parte«.

Es de esperar que gran parte de la militancia de IU apoye a Ramón Sánchez Arrieta en sus reivindicaciones, por lo que Javier Heras y sus afines están tratando de trasladar la toma de decisiones a Ganemos, donde tienen el control absoluto, un dominio adquirido en base a dos factores: expulsar a compañeros y compañeras con sus actitudes poco democráticas y nada transparentes, y acompañarse en las asambleas de todos los familiares posibles para asegurar los resultados de las votaciones. Difícilmente va a poder Heras defender una postura en Ganemos si su formación ha adoptado la contraria, por lo que está intentando «desactivar» la asamblea de Izquierda Unida utilizando para ello la mesa coordinadora.

La situación, como hemos comentado, es radicalmente distinta en el seno de Ganemos, cuya mayoría, interesada o no, no quiere ni oir hablar de dejar sus funciones en el gobierno municipal. De hecho la situación de Miryam Pérez les ha venido como anillo al dedo a Javier Heras y Narciso Romero, pues con la salida de Izquierda Independiente del tripartito, no tendrían ya ningún impedimento para hacer realidad los «Pactos de Fuente del Fresno» y poder gobernar con el apoyo de Ciudadanos, una opción que fue rechazada mayoritariamente por la Asamblea de Ganemos Sanse tras las elecciones municipales. Ante esta tesitura, Arrieta plantea que es necesario que Ganemos deje el gobierno municipal si el Alcalde decide seguir sin tomar medidas en el caso de la concejala de Cultura. Existe la posibilidad de que, si sus demandas no son atendidas, el concejal presente su dimisión, una renuncia que precipitaría el ascenso de Angeles Barba, número 4 de la candidatura de Ganemos y afín a Heras, quien durante la conformación del frente de izquierdas se mostró en diversas ocasiones contraria a cualquier confluencia con el resto de formaciones progresistas del municipio.