Es desconcertante que el consistorio de San Sebastián de los Reyes haya subido los impuestos y las tasas municipales hasta un cien por cien (100%) en el caso de la recogida de residuos urbanos, un diez por ciento (10%) ha incrementado el IBI, y entre el siete (7%) y en algunos casos llegando hasta el veintiuno (21%) los servicios funerarios que presta el Ayuntamiento.
Es desconcertante que esta subida de impuestos se produzca en un momento en el que la economía de buena parte de las familias de este municipio se encuentre considerablemente mermada, tras las consecuencias sufridas por la pandemia, la guerra, y la recesión económica. Si la salud económica de las clases populares no estaba ya suficientemente erosionada, en los últimos tiempos se ha producido un incremento astronómico de los precios de la energía eléctrica, del gas de uso doméstico, y los carburantes. Pues, aun así, el gobierno municipal compuesto por el partido Socialista (PSOE) y Ciudadanos (Cs), deciden subir también y de forma muy considerable los impuestos en SanSe.
Igualmente desconcertante es el hecho, de que hayan sido solo dos de los siete partidos que conforman el pleno Municipal, Partido Socialista y Ciudadanos, los únicos que hayan propuesto y aprobado tan importante subida de impuestos. Subida ,que para su aprobación ha sido necesario hacer uso del voto de calidad del Alcalde, lo que pone de manifiesto, que el actual gobierno de Sanse muestra una escasa voluntad de buscar acuerdos y favorecer el consenso entre los representantes municipales.
Más desconcertante todavía, es que Ciudadanos (Cs) haya defendido y aprobado esta medida, cuando basaron su campaña electoral en la bajada de impuesto y la reducción del gasto público. Desconcierta mucho, que quienes abogaban por minimizar los gastos del Ayuntamiento, financien ahora a dieciocho asesores o personal de confianza política, con generosos sueldos y cómodos trabajos.
Pero el desconcierto no para aquí, pese a que lo expuesto ya es suficientemente escandaloso, decepcionante y vergonzoso. En este episodio sobre la subida de las tasas municipales, se ha producido además un hecho que podría considerarse políticamente repulsivo, expresión que se justifica en la actitud mantenida por un concejal de este Ayuntamiento.
Para hacer posible este incremento de precios (10% el IBI y el 100% a la tasa de recogida de basura que pagamos todos), era necesario que el concejal que representa a la coalición formada en Sanse por Más Madrid, Izquierda Unida, y Equo, mantuviera un comportamiento indigno ante sus electores e impropio para ser representante público. Este representante ha tenido que incumplir el programa con el que se presentaron en Sanse estas tres formaciones políticas (Izquierda Unida, Equo y Más Madrid), ya que en él nada decían de subir los impuestos o las tasas municipales.
No puede haber mucha duda en considerar como un fraude esta actitud, que no hace otra cosa que socavar la confianza de los electores y desprestigiar la democracia y sus instituciones. Ha faltado a la palabra, a las promesas y compromisos adquiridos en los comicios municipales, engañando a los votantes, depauperando las organizaciones a las que representa, para finalmente conseguir con su actitud y ausencia, perjudicar considerablemente la economía de las familias de Sanse.
Gracias a su comportamiento ha sido posible aprobar esta espectacular subida de precios municipales, él, Javier Heras, ha sido el máximo responsable de elevar al doble la tasa por la recogida de basuras, incrementar 10% el IBI y aumentar el coste de algunos de los servicios funerarios hasta un 21%. Él, el concejal de M.M-I.U-EQUO, tenía la posibilidad de impedir la aprobación de una medida tan impopular, como ha sido la subida de precios de servicios municipales privatizados, y, además, tenía el deber de oponerse en cumplimiento de su programa electoral y el de las organizaciones a las que representa.
Para mayor desconcierto, al menos una de las tres organizaciones a las que representa este edil, Izquierda Unida, publicó en su Web estar en absoluto desacuerdo con esta medida impositiva, y por tanto su voto en el pleno hubiera sido NO. Sin embargo, el concejal en cuestión, representante de esta organización en el pleno del Ayuntamiento, se abstuvo de votar, y también de exponer su opinión y la de las organizaciones de las que es portavoz. Sin embargo, la posición de las otras dos formaciones políticas a las que representa este edil, Equo y Más Madrid, no se conoce, no ha habido por su parte ninguna declaración pública al respecto. ¡Vaya, como si no existieran!
La táctica que hizo posible la subida de los precios públicos que ahora sufrimos, fue la no asistencia de Javier Heras a los plenos convocados para acordar la medida. ¿Con su acuerdo tácito? ¿Estaba pactado previamente? El hecho es que no asistió a ninguna de las dos votaciones.
Su inhibición era imprescindible para que la subida fuese aprobada, pues las posiciones conocidas de los grupos municipales, empataban en votos, a favor estaba el PSOE y Ciudadanos, en contra Populares, Vox, Izquierda Independiente y Podemos, quedando así el desempate en manos del representante de Más Madrid- Izquierda Unida-Equo.
Su apoyo tácito, que es lo que realmente se produjo en los dos plenos en los que se trató y votó este asunto, se materializó no asistiendo a ninguna de las dos convocatorias realizadas para debatir y decidir la subida. De esta manera evitó tener que posicionarse, no ejerciendo así el voto en representación de los casi dos mil trescientos vecinos y vecinas que depositaron su confianza en él, y en la de los partidos a los que representa.
Sin su pronunciamiento el empate estaba garantizado, entre los que daban el SÍ a la aprobación, y los que estaban en contra, aprobándose finalmente con el voto de calidad del alcalde. ¡Como desconciertan y confunden estas maniobras que envilecen y desprestigian el noble arte de la política, y socaban sin duda los cimientos de la Democracia!.
Hubo dos plenos para decidir sobre este asunto, dos oportunidades tuvo para pronunciarse, entre ambos plenos distaron varias semanas. En el primero, que contó ya con la ausencia de este conejal, fue aprobada la medida con los votos favorables del PSOE y Cs, y haciendo uso el alcalde del voto de calidad, como estaba previsto y era de esperar. Sin embargo, sucedió que en el periodo de exposición pública, Izquierda Independiente y vecinos de Fuente el Fresno, presentaron alegaciones teniendo que repetirse el pleno, y volviéndose a someter a votación la propuesta del incremento de las tasas municipales.
Javier Heras tampoco se presentó en este pleno, ni siquiera se conectó telemáticamente, como sí hicieron otros miembros de la corporación. Bajo el argumento de encontrarse de baja laboral, excusó cualquier tipo de participación en este asunto, no ejerciendo el derecho que tienen sus representados a través de su voto, ni dándoles la oportunidad de fijar su posición frente a un asunto, que afecta de forma muy directa a todos y todas las vecinas de Sanse. Además de no posicionarse en el pleno del Ayuntamiento, tampoco por su parte ha habido ningún tipo de comunicado ni declaraciones en medios de comunicación.
Aun sabiendo la importancia que su posición tenía en este asunto, e incluso habiéndose manifestado públicamente días antes de celebrarse el segundo pleno una de las organizaciones a las que representa, Izquierda Unida, posicionándose claramente en contra de la medida, la actitud que mostró el deshonesto concejal, fue la misma que la mantenida en el primer pleno. Nada sirvió para evitar su apoyo (tácito) a la subida de impuestos a las vecinas y vecinos de esta localidad, ya que volvió a ausentarse y ni siquiera se conectó telemáticamente, evitando tener que posicionarse cuando es una obligación de los representantes públicos, para eso se les paga, ¿o no?
El comportamiento que ha mantenido el deshonrado concejal, suscita algunas importantes dudas que dan que pensar, e invitan a hacerse algunas preguntas:
¿A quién representa este concejal? ¿va acaso por libre, y solo tiene en cuenta sus intereses particulares? Pero quizás lo más inquietante sea la duda sobre si ha habido o no contrapartita, para mantener unas actitudes tan truculentas, indignas y desleales. ¡Absolutamente desconcertante y por supuesto deleznable!
Después de lo expuesto, y ante la aproximación de las elecciones municipales y las declaraciones sobre la unidad de la izquierda en Sanse que han hecho algunos de sus portavoces, me surge una inquietante duda. ¿Esa pretendida unidad se fraguará con personajes como el descrito y las organizaciones a las que representa? Si esa es la gente con la que se pretende sumar para hacer en este pueblo la unidad de la izquierda, es que se han vuelto locos y no tienen en consideración los valores morales que deben distinguir a la izquierda.
Alfonso.
Gracias por este artículo informativo, con un relato riguroso. El título se me hace pequeño para lo que expone, un ejemplo de política de intereses manipulativa. Si subieran los intereses para atender necesidades reales, habrían abogado por subir los directos, no los indirectos, y tampoco, por ejemplo, habrían multado a la gente que intenta defender a los grupos más sensibles, como ya se denunció en vuestro otro artículo del caso de las tizas y la concentración subsiguiente. Dan ganas de pedir firmas en contra de este señor, Javier Heras.