Vuelan las cometas en el viento de otoño,
como vuelan nuestras ilusiones en el devenir del tiempo,
sin saber que su momento y su espacio se acaban, en la infinita codicia de los que nunca se sacian.
En la necesidad innecesaria, insana, de crecer sin medida, moriremos de éxito.
Tiempo al tiempo.
Fidel Hoyos