Los matan a bombazos, con sus aviones, con sus militares, con sus terroristas; y si escapan, los matan también, de hambre, de frío o los arrojan al mar. Lo estamos viendo, nos lo están enseñando, lo deciden en nuestro nombre, en el de los europeos y las europeas.
Pero nosotros y nosotras, en general digo, sin fijarme en nadie, dormimos a pata suelta, sin que nada perturbe nuestras conciencias. Como yo no soy sirio, ni yo libanesa, ni de Irak o Palestina, nada tengo que temer. Qué incautos, qué desaprensivos, qué inconscientes. Como si a nosotros, a los nuestros no les pudiera pasar.
Y aunque no nos pase, que de alguna forma también nos lo están haciendo, en qué mundo vivimos que no nos revolvemos, que no somos capaces de decir ¡basta!, de decirles que no en nuestro nombre, porque nosotros y nosotras no somos asesinos.
Por favor os pido, que no sigamos permitiéndolo. Soy de los que piensan que si todas y todos, o por lo menos muchas y muchos nos enfrentáramos, no continuarían con semejante ignominia.
Claro que tu posición es importantísima si reaccionaras, si tomáramos conciencia, si no metiéramos la cabeza debajo del ala, si saliésemos a la calle a decir basta de genocidio contra la humanidad, basta de hacer sufrir a los niños y a sus familias hasta verles morir.
Joder, que son personas como nosotras y nosotros, que sienten como tú y como yo, que quieren vivir también como queremos hacerlo nosotras y nosotros, que huyen de guerras que ellos no han generado, que les matan con las armas que nosotros vendemos. Joder, reaccionar de una puta vez, perdonarme la expresión, sé que es un poco fuerte, pero más fuerte es lo que está pasando. Estoy muy indignado, esto me está vaciando la dignidad, porque soy europeo, porque soy un ser humano.
¡CÓMO PODEMOS DORMIR A PATA SUELTA CON LO QUE ESTÁ PASANDO!
Por favor despertad, y darle una oportunidad a la dignidad de las y los europeos.
Alfonso