La recién creada Plataforma Lazora Non Grata denuncia públicamente la negativa de la mercantil Lazora a negociar con sus inquilinos. En un manifiesto al que se han sumado numeras organizaciones, partidos políticos y personas que defiende el derecho a la vivienda, la Plataforma Lazora Non Grata explica que nace con la pretensión de paralizar la sucesión de desahucios que se avecinan tras la finalización de los contratos de alquiler de unas viviendas que en su día fueron públicas, protegidas y sociales, pero que ahora se han convertido en un negocio privado que se olvida de las graves consecuencias familiares que suponen las acciones de fondos como Lazora.
La Plataforma pide que no se realicen prácticas abusivas producto de la especulación con las viviendas, especialmente las que provienen de suelo público, y que se paralicen los desahucios con el fin de buscar unas condiciones justas de alquiler. El próximo 14 de febrero es el día fijado para el desalojo de Ruth, su marido y sus dos hijos de 1 y 6 años.
Para conseguir parar el desalojo de la familia de Ruth la Plataforma Lazora Non Grata ha organizado dos importantes acciones. La primera es una concentración autorizada ante el Congreso de los Diputados el martes 12, a las 11:00 h., en la que ya han confirmado su asistencia representantes políticos del Parlamento.
Si no se escucha su petición de negociar con Lazora continuarán con una acampada en el edificio Juan Gris, 3 – Alonso Zamora Vicente, 14 de San Sebastián de los Reyes, donde vive actualmente Ruth con su familia, desde el día 12 de febrero a las 19:00 h. hasta el martes 14 de febrero, fecha en la que está fijado su desahucio.
El edificio situado en las calles Juan Gris, 3 – Alonso Zamora Vicente, 14 de San Sebastián de los Reyes se construyó en un terreno público que la Comunidad de Madrid adjudicó a Levantina Explotaciones Residenciales SL. Esta empresa quiebra dos años después para pasar a manos de Lazora, S.A., quien tiene como apoderado al Grupo Azora. En 2011 suben el importe del alquiler de 247€ a 560€ mensuales, eliminando también la opción de compra. Cinco años más tarde, Lazora realiza los trámites para liberar de la protección oficial las viviendas, ofreciendo a sus inquilinos la posibilidad de comprarlas por un precio 3 veces superior al que tenían fijado.
En enero de 2018 Lazora decide volver a alquilar y deja de vender las viviendas. Así, según se suceden los vencimientos de alquileres sociales, remite burofax con subidas de alquiler de hasta un 68%. O pagas lo que piden o a la calle, pese a tener decenas de pisos vacíos en el edificio.
El portavoz de la Plataforma, Carlos Somavilla, afirma que “no vamos a consentir que se produzca ni este ni ningún otro desahucio de las familias a las que les va a ir venciendo su contrato en el futuro y cuyas subidas abusivas del alquiler no pueden asumir, más le vale a Lazora sentarse a negociar para resolver estos casos y no sentarse a esperar la llegada de los lanzamientos. Nosotr@s no vamos a parar hasta solucionar el último caso”.
EsLoQueHay, que también se ha adherido a la Plataforma Lazora Non Grata, ha hablado con Ruth Mélida, inquilina de uno de estos pisos y portavoz también de la plataforma.
EsLoQueHay: ¿Cómo valoras el haber llegado hasta esta situación?
Ruth Mélida: “Es indignante que los gobiernos permitan que los suelos y bloques públicos pasen a manos privadas y mucho más indignante, a manos de Fondos Buitres. Para éstos es un negocio redondo, les salen prácticamente gratis y pasado el tiempo de protección se hacen ricos. ¿Y qué hacemos l@s afectad@s que vivimos dentro de esos pisos que no tenemos condiciones económicas para optar a vivienda libre? Yo no soy la primera, ni seré la última víctima de esta avaricia, somos muchísim@s. Será todo lo legal que ell@s quieran, pero es un rato inmoral, injusto e inhumano. Tengo 2 hij@s menores que se verán en la calle porque estos desalmados no quieren negociar. No pido vivir gratis, ya venía pagando 600e y pagué religiosamente. Me echan porque no puedo asumir la subida abusiva que me imponen. Soy víctima de su
EsLoQueHay: ¿Cómo vives estos días previos a la fecha prevista para la ejecución del desahucio?
Ruth Mélida: «Lo vivo con ansiedad, ya me está atacando. No puedo dormir, sobre todo no sé qué hacer con mis cosas. A la vez intento que afecte lo menos posible a mis hijos, es lo que más me preocupa. Espero y deseo que intenten negociar antes que la sangre llegue al río».
EsLoQueHay: ¿Te has sentido apoyada por el pueblo de Sanse y sus instituciones?
Ruth Mélida: «Apoyada por mucha gente individual y por todos los que se han adherido al manifiesto de nuestra plataforma. Me emociona muchísimo todo el tiempo, dedicación, pasión que están dedicando un gran numero de personas en defender mi lucha. Mi agradecimiento es enorme y eterno. Me hace sentir que aún queda esperanza en que las cosas puedan cambiar, mientras siga existiendo gente así, la solidaridad no ha muerto. La lucha continua».