Javier Heras, concejal de Recursos Humanos en el Ayuntamiento de Sanse elimina dos plazas públicas de conserje de colegios en la modificación de la plantilla presentada esta semana. Mientras tanto el contrato para que una empresa privada preste el servicio sube su precio cerca del 40%. Todos los sindicatos menos CCOO exigen que esas plazas no desaparezcan. La empresa adjudicataria se lleva el concurso con una puntuación baja en las denominadas claúsulas sociales.
El pasado ejercicio, cuando todavía Ramón Sánchez Arrieta era Concejal de Recursos Humanos, se llevó a cabo un proceso de promoción interna de las escalas más bajas de la administración local, en la que los dos trabajadores que tenían plaza de conserje en sendos colegios ascendieron a la categioría de Auxiliar Administrativo, quedando esos puestos vacantes. Desde entonces es una empresa privada la que provee el personal que realiza dichas funciones, pues los colegios no pueden quedarse sin una figura fundamental para su funcionamiento. El Consistorio podría haber optado por otras soluciones hasta que se volviesen a convocar esas plazas en una oferta de empleo público, como eran llamar a las personas que conforman la lista de espera o contratar interinos. El proceso de promoción era algo pactado, no era un imprevisto, lo que dejaba margen para ello, pero el Gobierno de «izquierdas» prefirió, una vez más, que una empresa externa fuese la beneficiada.
La semana pasada el Concejal Javier Heras, de Ganemos Sanse, convoca a los sindicatos en la Mesa Técnica de Empleo para presentar la propuesta de modificación de plantilla y la Oferta Pública de Empleo (OPE) para 2017. Casi 11 meses han tenido que esperar para negociar un asunto tan importante para un Ayuntamiento como es reforzar la plantilla, máxime cuando durante los 8 años de gobierno del Partido Popular apenas se cubrían vacantes. En dicha proposición Heras planteaba sin ambages amortizar (que desaparezcan) esas dos plazas de conserje, algo a lo que los sindicatos, excepto Comisiones Obreras, se negaron en rotundo por entender que es precisamente en las escalas más bajas donde más necesidades de personal hay. En una segunda propuesta presentada horas después Heras ofrecía la posibilidad de eliminar sólo una de esas plazas, si bien en el borrador de plantilla que enviaban durante el fin de semana a los partidos políticos la otra plaza de AP (conserje) se reconvertía en C2 (auxiliar administrativo), consumando de esa manera su intención inicial de que no quedase ni una sola plaza pública de ese tipo.
Las razones de esta obstinación se pueden entender si se echa un vistazo a las licitaciones de los últimos años del Servicio de conserjería para colegios públicos de Educación Infantil, Primaria, Educación Especial y Escuelas Infantiles Municipales de San Sebastián de los Reyes. A mediados de 2016 se saca un concurso por un periodo de 3 meses con un precio de licitación (el precio máximo que pueden ofertar las empresas) de 24.169,52€ al mes para 9 conserjes. Para finales de ese año entra en vigor un nuevo contrato por 9 meses prorrogables cuyo coste máximo para las arcas municipales se establece en 22.157,94€ al mes, siendo en este caso 10 los trabajadores necesarios.
Sin embargo este verano se gesta un contrato bastante más goloso. En lugar de ser para un periodo corto de tiempo la adjudicación se hace para 3 años a razón de 11, 13 y 14 conserjes en cada uno de ellos. El precio máximo que propone la Delegación de Contratación, que también dirige Javier Heras, sube casi un 40% con respecto al anterior contrato hasta los 29.965,40€ al mes de media. Es decir, más de 280.000 euros de incremento durante toda la vigencia del contrato. Se eliminan las plazas de empleo público y se aumentan los contratos con la empresa privada, una política que en absoluto se puede denominar de progresista. Desde UGT indican que «nos negamos en rotundo a que se amorticen esas plazas, como sindicato no podemos permitir que se privaticen los servicios municipales. La realidad a día de hoy es que donde antes había dos plazas de conserje ahora hay una empresa externa. En dos colegios donde antes había dos funcionarios ahora hay dos trabajadores cobrando la mitad, en unas condiciones penosas«.
Cabe reseñar también que la empresa adjudicataria de este último contrato gana el concurso con una baja en su oferta económica del 42,32%. La tan cacareada inclusión de claúsulas sociales en los contratos públicos representa en este caso un irrisorio 2%, mientras que la oferta económica tiene un peso del 80% en la decisión final. La adjudicataria, SBC Outsourcing SL, obtiene 0,7 puntos sobre 2 en la valoración de las medidas de conciliación, quedando en este aspecto por detrás de otras 3 empresas. Sin embargo, dado que su propuesta económica era sensiblemente inferior a la de sus competidores, y que este aspecto tiene un peso 40 veces superior al de las claúsulas sociales, la empresa que menos dinero oferta y, probablemente, la que menos pague a los trabajadores que desarrollen el servicio, es la que se lleva el gato al agua.
Al final no tendré más que dar la razón a cada vez más gente estos incapaces están generando disidencia por su ineficacia, taruguez o quizás la famosa palabra tan de moda prevaricación, espero que no sea por esto último, sino serían unos hijos…