Esloquehay reproduce las crónicas que nos envían el Mago Oliver y su ayudante Eva del viaje que están realizando por diferentes campamentos de refugiados en Grecia. El objetivo del viaje es llevar un poco de felicidad a miles de niños y niñas sirios, afganos e iraquíes que malviven en muchos casos en condiciones deplorables a la espera de conseguir el asilo político, además de llamar la atención sobre su situación. Desde esloquehaysanse.es queremos agradecerles a ambos su iniciativa y que nos dejen ser su altavoz. ¡Mucho ánimo!
GRECIA. 30 JULIO.
Después de 3 largos días de viaje desde Bilbao, ayer fue nuestro primer día en Grecia. Nada más llegar fuimos a nuestro primer destino : el campo de refugiados de Filippiada. Más de 200 niños en su mayoría sirios y afganos viven aquí en condiciones inhumanas. Apenas dos metros cuadrados para un colchón en unas jaimas donde se agrupan 8 ó 9 miembros de diferentes familias es todo lo que poseen. No tienen ni televisión , ni escuela, ni juguetes. Nada.
Al llegar fuimos recibidos de mil amores. Enseguida vimos las primeras reacciones al hacerles pequeños efectos de magia, y rápidamente nos ofrecieron sillas para sentarnos y agua (agua que la tienen racionalizada en horarios muy concretos). Los 42 grados que hacía ayer a media mañana nos hizo valorar estos pequeños gestos que nos demuestran una vez más que lo poco que tienen lo comparten.
Durante toda la jornada fuimos paseando por el campo en todo momento acompañados por infinidad de niños que no se despegaban de nosotros. Pudimos ver la gran labor de todos los voluntarios que vienen aquí a ayudar: con las comidas, con la ropa que llega de diferentes partes de Europa, con la logística, con el apoyo psicológico, etc.
Si no llega a ser por todos estos voluntarios de tan tan gran corazón el día a día de estos campos sería invivible.
Durante el día estuvimos exprimiendo cada minuto con la magia de cerca (chapurrean un poco inglés algunos y el resto nos entendían con el idioma universal del lenguaje gestual y con «espanarabicenglish» que improvisábamos).
Insistían los niños en todo momento en que estuviéramos a gusto, nos ayudaban a cualquier cosa, a cargar y descargar la furgoneta, a anunciar nuestro show de la tarde-noche, a llevarnos al rio para que nos dieramos un chapuzón con ellos, y mil detalles más.
Y a las 7 de la tarde llegaba nuestro gran momento, por fin el show de magia!!
Algunos problemas a mejorar para solventar la super energía , la inquietud y el nerviosismo de todos los peques, pero vimos que al final los niños son niños en su esencia provengan de donde provengan y se rieron, alucinaron, reaccionaron y aplaudieron igual que cualquiera de nuestros «niños» de los coles y pueblos de Euskadi.
Al acabar se nos caía el alma al suelo al ver que no querían que nos fuésemos. Les dimos varios de los balones oficiales que muy amablemente nos ha donado Mikel San José, futbolista del Athletic de Bilbao y de la selección española, y os aseguramos que esos balones fueron recibidos con una alegría mayor que cualquiera de nosotros en todas las noches de reyes que hemos tenido en nuestras vidas. Queremos agradecer desde aquí a Mikel por el apoyo que nos ha dado en todo momento a este proyecto.
Querían los niños también más y más caramelos (del juego con el que acabamos nuestro show) y sobre todo querían cariño y abrazos. Se nota la falta de amor y las grandes carencias que tienen todos ellos tan solo al ver como nos abrazan, como si tuvieran «superglue» para no separarse de nosotros.
Pudimos a la noche desconectar un rato tomando algo con los voluntarios en el pueblecito de al lado, pero nuestras mentes desde que salía ayer del campo de refugiados nuestra furgoneta, están en todos estos niños que ayer no nos atrevíamos a despedirnos de ellos. Está en que será del futuro de Ali, de Mustapha, de Nur, de Alexandra, etc.
Ahora salimos en breve hacia Petra, al norte de Grecia. Ahí nos esperan más de 500 niños todos ellos procedentes de Siria.
Nos han avisado que será duro…
Mañana os contamos.
Un saludo a todos y recordad siempre:
Somos unos afortunados y unos privilegiados por haber nacido donde hemos nacido.
Un beso mágico
Óliver & Eva.