Bajo el epígrafe de la palabra Democracia, en nuestro país, existen partidos políticos, sindicatos y asociaciones de todo tipo, incluidos una diversidad de Empresas y oligopolios que pueden parecer democráticos.
La palabra Democracia se define como la participación de todos los miembros de un grupo o asociación en la toma de decisiones, en ella se pueden dar mayorías y minorías y, de los resultados finales, a estas últimas, les toca asumir el acuerdo mayoritario.
Estos son los principios de la democracia, pero no siempre son aceptados por la minoría, y de ahí nacen las escisiones, sobre todo en el campo de los partidos políticos. La cultura de la unidad democrática no ha calado lo suficiente en los grupos de la Izquierda en nuestro país desde los inicios de la democracia, tras la dictadura, se corrobora sobradamente.
Cuando una minoría se produce en un partido suelen saltar y crear otro nuevo, para así hacer prevalecer sus presupuestos que ya fueron desestimados, en su momento, por la mayoría de la que se marcharon, siendo que, los principios troncales, suelen ser los mismos.
La “cultura” del Poder suele prevalecer ante la Cultura de la Unidad y del apoyo a la toma de decisiones mayoritario. La división, en las Organizaciones de la Izquierda, también dividen a la clase trabajadora, de sus consecuencias nace el muro de la intolerancia para la unidad de acción democrática en el mundo de las clases trabajadoras a la que todos dicen defender.
Los pueblos, la clase trabajadora, para avanzar hacia una sociedad Republicana, socialista y democrática debe estar muy bien formada, e informada, y para ello las Organizaciones que agrupan a multitudes de trabajadores y que, en sus principios, promulgan esa nueva Sociedad, debieran ponderar actuaciones en esa dirección.
Observando el devenir de la sociedad española en las generaciones a partir de los años setenta, del siglo pasado, en general, hay un grave desconocimiento de lo que fueron los casi cuarenta años del fascismo en España. Aquí cabe incluir, por la misma razón, a Alemania e Italia, lo vemos más adelante.
Ese desconocimiento, junto a las graves consecuencias sociales que van implícitas con el prolijo desarrollismo capitalista, lleno de aristas incisivas y dolorosas, sin más horizonte y planificación que la permanente acumulación de riqueza a costa de una sociedad mayoritaria que es la que los sostienen y sufren, nos está llevando, una vez mas, hacia un futuro que se dibuja negro y sangriento para esa inmensa mayoría a la que se la domestica con todo tipo de mentiras y juguetes electrónicos de todo tipo llenos de banalidades y alienación.
Sobre ese futuro es obligado valorar lo que está sucediendo en Rusia, Jerusalén, EE.UU, Vietnam del Norte, Turquía, Argentina, Hungría etc, etc. y que son, a la vez, un grave problema para el resto de las democracias liberalcapitalistas, que comienzan a estar atrapadas por el expansionismo imperialista dictatorial del propio capitalismo que ellos también defienden. “Es la decadencia de la política del capitalismo terminal” del que habla en su libro el profesor titular de Sociología y Antropología Social, Andrés Piqueras, de la Universitat Jaume I de Castellón. Que nos está mostrando a toda la humanidad cómo se rompe, con una sola firma, la Democracia, La Paz, la Solidaridad, la Concordia y los Derechos Humanos en todo el hemisferio occidental. El brazo en alto de magnates en EE.UU son el preludio del neo-nazismo que se expande de nuevo.
Estas generaciones ignoran que durante cuarenta años, en España, sufrimos la Dictadura del Nacionalcatolicismo franquista, doctrina golpista y nacionalista que tuvo como socio participativo y privilegiado a la Iglesia Católica Apostólica y Romana, las derechas españolas son sus herederos, aunque lo disimulen.
Ese largo, tenebroso y trágico periodo para los que no confesábamos con el Régimen, que combatíamos con huelgas, octavillas y con diversas Asociaciones, fuimos, hasta los últimos días, incluso después, perseguidos, encarcelados, asesinados en interrogatorios en el edificio de la Puerta del Sol ( D.G.de S) y fusilados por una Gestapo española (Policía Política), siempre con el beneplácito colaboracionista de la Iglesia Católica española. Ese largo periodo de dominio absoluto de la sociedad les permitió, además, que miles de españoles y españolas fueran fusilados y enterrados, y amontonados, en cientos de fosas comunes, siendo despojados, en muchos casos, de sus haciendas y propiedades de las y los fusilados.
De Italia supimos y sufrimos el fascismo italiano, movimiento político creado por Benito Mussolini,jefe del Gobierno Italiano desde 1922 hasta 1943, que fue decapitado por su maldad, ayudó al franquismo mandando tropas en apoyo al golpe militar del franquismo contra la II República Democrática Española. Están de nuevo en el gobierno, y esto debería importar y mucho a toda la Izquierda española.
También supimos del Nazionalsocialismo alemán (NAZISMO, de forma acortada) otro régimen totalitario y también asesino, que desde 1921 hasta su derrota el 8 de Mayo de 1945, cometió el mayor Holocausto (Sacrificio religioso entre los judíos, en que se quemaba toda la víctima) de la Historia moderna, con millones de asesinados y desaparecidos en Hornos Crematorios, sólo en Auschwiz, murieron alrededor de 1,1 millones de personas, El fascismo español también recibió ayuda militar alemana, destacando una patrulla aérea llamada Legión Cóndor, que bombardeó y arrasó el pueblo vasco de Gernika, con todos sus habitantes dentro. Pablo Picasso pintó el Guernica describiendo la barbarie, y con el color ceniza como fondo del mismo. De nuevo están cerca de llegar al poder en Alemania. El Liberalismo capitalista salvaje lleva el fascismo en sus resultados socioeconómicos para la sociedad.
¡¡ Cuántos trabajadores y trabajadoras deberían conocer la Historia reciente de nuestro país antes de coger su papeleta !!
Alfonso Romero