Homenaje al aniversario de la II República y a las mujeres que en ella lucharon y sufrieron.
Sola con mis pensamientos
hoy recibo una visita inesperada,
Carmen trae temblorosa
a un hombre herido.
Sus ojos hablan de miedo
y pide ayuda.
No pregunto,
bajamos los tres las escaleras
del sótano,
curamos sus heridas
y le doy un caldo caliente.
Es sólo un desconocido que quiere vivir,
nosotras no juzgamos
ni queremos saber.
Esta noche ruego
que no entren las sombras
en mi casa.
Pienso para mí que el pueblo existe
y trabaja por una hogaza de pan.
¿Por qué siempre tenemos que callar?
Los mandatarios de uniforme
pisan sin escrúpulo mi taberna,
amenazan y rompen vidas.
Carmen se arranca del pecho
un clavel y baila sobre el portón
mientras yo les sirvo el vino.
Mañana tendremos un nuevo sol.
Poema de:
Sastre & Flores