Asasa (Asociación Social Animalista de San Sebastián de los Reyes y Alcobendas) ha publicado en la plataforma reivindicativa Change.org una carta «dirigida al Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes» en la que pide el «comienzo inmediato del CES SanSe» (Captura, Esterilización y Suelta para la gestión ética de las colonias felinas). La Asociación recuerda que el alcalde Narciso Romero se manifestó públicamente el pasado 17 de noviembre «a favor de aprobar y aplicar, en San Sebastián de los Reyes, el Método CES» (véase vídeo, minuto 5.05).
El contenido de la misiva de Asasa, que fue publicada el viernes pasado y ya ha sido firmada por más de 650 personas, es el siguiente:
«Tras la Declaración Institucional aprobando el método CES, la reunión informativa celebrada en noviembre, en la que el mismo alcalde, Narciso Romero, se comprometió con el bienestar de las colonias, y la aprobación de una partida presupuestaria este enero para llevarlo a cabo, el Ayuntamiento ha paralizado su ejecución sin ninguna explicación ni fecha de puesta en marcha. Esto sucede en un periodo crítico para la efectividad del proyecto, ya que está empezando la época de celo. Este retraso pone en peligro la salud, el control de las poblaciones y el programa de adopciones unido a las castraciones, tanto de los gatos adultos, como de los que nacerán descontroladamente a causa de la indecisión del Grupo de Gobierno, ignorando las expectativas creadas en todos los alimentadores, los interesados en ser voluntarios del CES y todas las personas partidarias de una mejora de las condiciones de vida de nuestros gatos. Por ello, pedimos el inicio inmediato del programa de gestión de las colonias felinas, para evitar el sufrimiento y la muerte de los animales en las calles».
Asasa se presenta en estos términos
«Asasa no es una protectora. Hemos fundado Asasa -explican sus impulsores- para la creación y desarrollo de proyectos relacionados con la resolución de problemas que atañan a los animales. Lo social, que aparece en nuestras siglas, recoge la idea de que las necesidades y problemas de los animales van unidos a las necesidades y problemas de los seres humanos, y muchas veces derivan de nuestras propias condiciones de vida y de la sociedad en general. Los animales están a expensas de los recursos económicos, la educación y la concienciación que se tengan sobre sus necesidades y capacidad de sufrimiento».
Por eso -concretan desde la asociación-, «hemos dividido a los frentes de Asasa en tres líneas principales»:
1. La incapacidad de los propietarios de cubrir las necesidades básicas de sus mascotas
Hay casos en los que no hay irresponsabilidad, sino cambios en la situación de las personas o familias, en los que los animales son perjudicados por el recorte de los ingresos en la casa, incapacidades físicas, bajas pensiones, animales cuyos propietarios mueren…
2. Educación
Queremos que todo el mundo sea educado en el respeto y responsabilidad hacia los animales. Llevaremos a cabo actos, reuniones, charlas, visitas a colegios, actividades para niños y cuantos eventos podamos organizar, así como colaboraciones que nos parezcan interesantes, siempre desde un prisma “Social-Animalista”.
3. La violencia interpersonal
Este tipo de violencia trae consecuencias sobre los que creemos son el eslabón más débil. Dos de los tres individuos que en estos últimos meses de 2015 han ingresado en prisión por maltrato animal tenían antecedentes de violencia doméstica. Rescatar a estos animales no solo los pone a salvo a ellos, sino que ayuda a la víctima, ya que le facilita la salida y la denuncia, al quitarle al maltratador una de las formas de coacción hacia ella.
El papel que queremos que tenga Asasa es el de nexo de unión entre toda la gente que tenga estas mismas inquietudes. Creemos que la gente es más que un miembro de su familia o el trabajo con el que se gana la vida, que solo necesita un sitio para demostrar y desarrollar sus capacidades y que darle esta oportunidad puede ser un factor transformador de la sociedad.
Qué es el método C.E.S.
Captura, esterilización y suelta.
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